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Los tiempos cambian

Pastor Javier Bertucci

Domingo 31-10-2021

En los tiempos de la Biblia habían hombres con la capacidad de discernir los tiempos; aquellos que pertenecían a la tribu de Leví eran consultados por el rey del tiempo para poder entender que era lo que Dios quería hacer.

Una de las cosas que el enemigo usa para estancar a la Iglesia, es el costumbrismo, que viene por la falta de discernimiento de los tiempos.

Lucas 19:43-44: “Porque vendrán días sobre ti, cuando tus enemigos te rodearán con vallado, y te sitiarán, y por todas partes te estrecharán, y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación”.

Es peligroso dejar de hacer lo que Dios nos pide, pues, muchas veces los días malos llegan por dejar de oír la dirección de Dios. Entender los tiempos debe convertirse en una prioridad, de lo contrario, podemos llegar a dejar pasar la temporada de bendición, así como le sucedió al pueblo de Israel, quien deseaba volver a Egipto, y se quejaban ante Moisés (Números 11: 4-6). La costumbre que tenía el pueblo de Israel le impedía ver lo bueno que les estaba dando Dios y disfrutarlo.

Daniel 2:2: “Él muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos”.

Debemos estar atentos de los tiempos, porque ellos cambian; muchos hombres de Dios no los entendieron, tal es el caso de Juan el Bautista, quien le mandó a preguntar a Jesús si era o no el Mesías (Lucas 7:19); si Juan hubiese tenido discernimiento de los tiempos, habría conocido que Jesús era el Cordero que quitaría todo pecado. El no entender el tiempo de la visitación puede traer consecuencias peligrosas a nuestras vidas.

Cuando conocemos qué es lo que Dios quiere hacer y en qué tiempo, empezamos a dejar de lado nuestras visiones personales por unirnos a la de Dios, de lo contrario, solo nos enteraremos de lo que Dios hizo, pero sin nosotros. Debemos adecuarnos al tiempo de Dios, porque su voluntad afecta todo lo que existe, y al caminar conforme a ella, nuestra fidelidad debe mantenerse intacta.

No podemos tenerle miedo al cambio, debemos obedecer a Dios en cada decisión y mantenernos fieles, así como a nuestros principios. Jesús siempre valoró la fidelidad, por eso dijo que aquel que lo reconozca en la tierra, Él lo reconocerá en el cielo (Mateo 10:32-33), y esa es una base espiritual, debido a que el Cielo siempre respaldará la lealtad.

1 Samuel 3:2-4: “Y aconteció un día, que estando Elí acostado en su aposento, cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse de modo que no podía ver, Samuel estaba durmiendo en el templo de Jehová, donde estaba el arca de Dios; y antes que la lámpara de Dios fuese apagada, Jehová llamó a Samuel; y él respondió: Heme aquí”.

Dios va a levantar a hombres y mujeres que sepan discernir los tiempos, ellos serán una nueva generación que se posicionará en cada esfera importante de la sociedad para recomponer lo dañado. Dios va a buscar en su Iglesia a aquellos hombres y mujeres de Dios que, así como Samuel, tengan la vida de Reino y estén conectados con su voluntad para este país.